Marco Pantani, una leyenda inmortal

El 14 de febrero del 2004, una noticia que nunca habríamos querido oír saltaba a los telediarios, provocando una auténtica consternación. Marco Pantani, el Pirata, había fallecido. Su cadáver había sido encontrado en un hotel de Rimini, rodeado de botes de antidepresivos. Era el final de la cuesta abajo de un ciclista que se había convertido en una auténtica leyenda, especialmente en su país Italia.

La autopsia reveló que en Pantani había fallecido por una sobredosis de cocaína. Dos meses antes, uno de sus grandes rivales en las etapas montañosas, el Chava Jiménez, había muerto también sumido en una terrible depresión. Juguetes rotos de una época oscura en el ciclismo, que no pudieron superar la rápida transición entre el auge y la caída de su gloria deportiva.

Desde aquel fatídico día de San Valentín del 2004, la leyenda de El Pirata nunca paró de crecer, y miles de páginas llenaron libros y diarios, construyendo un relato entre épico y dramático, siempre rodeado de la polémica entre la hazaña deportiva y el dopaje. Los datos y circunstancias de su muerte no dieron lugar a dudas a la mayoría de la opinión pública, y todos aceptamos y creímos que Marco Pantani se había suicidado, incapaz de superar en lo que se había convertido su vida desde que los carabineri le sacaron de aquel Giro de 1999, a solo dos días de proclamarse vencedor del mismo.

15 febrero

SE N’É ANDATO – Portada de La Gazzetta dello Sport del 15 de febrero de 2004. («Se ha ido»)

Pero la familia de El Pirata nunca aceptó la teoría del suicidio y siguió luchando por aclarar el fallecimiento del italiano. Las investigaciones privadas continuaron, hasta que el día 2 de agosto de este 2014, diez años después de la desaparición de Pantani, el diario deportivo italiano de referencia, abría con una portada que impactaba y volvía a traer el caso a la actualidad. «Pantani fu ucciso» (Pantani fue asesinado). Aclaraba el rotativo transalpino que las investigaciones médicas posteriores indicaban que la gran cantidad de cocaína encontrada en el cuerpo de El Pirata solo podía explicarse a partir de una ingesta de la droga diluida en agua. Esta hipótesis sirvió como base para la reapertura del caso por parte de la fiscalía italiana, reavivando las sospechas de un asesinato.

Empieza así un nuevo capítulo en una historia que escribió sus páginas más bellas entre Alpes, Dolomitas y Pirineos, y que se fue tiñendo de tintes dramáticos oscurecidos por dopaje, drogas y depresión. Una suma de ingredientes dignos de las mejores películas del cine negro para un personaje que jamás dejó indiferente a nadie y que sigue siendo un ídolo para los tiffosi italianos. Sus ataques enseñando los dientes en las montañas, sus orejas de soplillo o su pañuelo de bucanero tapando la calva quedarán en la retina de todos, y las cunetas italianas se llenarán cada año del recuerdo de El Pirata. Ahora solo toca esperar cómo termina el enésimo episodio de la leyenda.

PANTANI FU UCCISO - Portada de La Gazzetta dello Sport del 2 de agosto de 2014. ("Pantani fue asesinado")

PANTANI FU UCCISO – Portada de La Gazzetta dello Sport del 2 de agosto de 2014. («Pantani fue asesinado»)

Escrito por:

@VictorGavito

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